EL 6 DE JULIO DE 2009, EL REAL MADRID PRESENTABA AL FUTBOLISTA MÁS CARO DE LA HISTORIA
Santiago Bernabéu, 6 de julio de 2009. Hace exactamente tres años, el Real Madrid presentaba en sociedad al fichaje más caro de la historia del fútbol, al portugués Cristiano Ronaldo. El delantero llegaba procedente del Manchester United a cambio de 96 millones de euros. Tres años después, no cabe duda de que las expectativas creadas en torno a su llegada se han cumplido.
 |
144 partidos y 146 goles. Ahí es nada. Los números de Cristiano Ronaldo en estos tres años reflejan a las claras que su fichaje fue, en cierto modo, una ganga. Ya lo reconocía hace unos meses Sir Álex Ferguson, quien se lamentó por no haber pedido más dinero al Real Madrid. 80.000 personas acudieron a Chamartín para ver la puesta de largo del crack luso, que llegaba de la mano de hombres como Ricardo Kaká, Álvaro Arbeloa, Xabi Alonso o Karim Benzema. La inversión de Florentino Pérez fue grande, pero tres años después, los réditos de ésta comienzan a hacerse notar.
Salvo Kaká, quien no ha cumplido con su papel, el resto de los grandes fichajes de aquel primer curso de Florentino Pérez a su regreso al Real Madrid han funcionado a la perfección. En especial un Cristiano que ha mejorado año tras año, y que de cara a la próxima temporada amenaza con volver a destrozar sus propios registros, y también los ajenos. Con Pellegrini, CR7 logró 26 goles en 29 partidos de Liga. Una lesión inoportuna de tobillo le privó de destacar aún más en su primer año, pero con la llegada de Mourinho todo fue a mejor.
El luso superó la marca de Hugo Sánchez logrando 40 goles en 34 partidos en su segundo año, y la pasada temporada fue a más consiguiendo la nada desdeñable cifra de 46 goles en 38 partidos; es decir, jugándolo absolutamente todo. Y es que las prestaciones de Cristiano, también en cuanto a su estado físico, han ido a más con el paso del tiempo. Tres años después de que 80.000 gargantas corearan su nombre durante su presentación, la afición tiene verdaderos motivos para ver al portugués como la figura del equipo, como el ídolo que es. Y que sea por muchos años más.
